Se está realizando una campaña para boicotear la última película de James Cameron, “Avatar: The Way of Water”, debido a una variedad de problemas.
Algunos nativos e indígenas acusan a la película, al igual que su predecesora, de apropiación cultural y uso del complejo del salvador blanco.
“Únase a los nativos y otros grupos indígenas de todo el mundo para boicotear esta película horrible y racista”, tuiteó Yuè Begay, artista navajo y copresidente de Indígena Pride Los Ángeles .
“Nuestras culturas fueron apropiadas de una manera dañina para satisfacer el complejo salvador de algunos hombres”.
El boicot a la secuela resurgió la conversación que tuvo lugar en 2009 cuando se lanzó por primera vez “Avatar”.
La película original sigue a la gente Na’vi del planeta ficticio Pandora, un grupo que lucha contra los colonizadores de la Tierra que intentan arrebatarles sus recursos.
La secuela de la película de 2022 sigue a la misma tribu cuando abandonan su antigua tierra por una cerca del océano, pero aún enfrentan los mismos problemas con los invasores de la Tierra.
Otro factor que alimenta el boicot son los comentarios que Cameron hizo en 2010 sobre la tribu Lakota Sioux en un artículo en The Guardian , donde habló sobre oponerse a la represa hidroeléctrica de Belo Monte en el Amazonas.
El director ganador del Oscar dijo que la colonización y el desplazamiento de los nativos americanos fueron una “fuerza impulsora” en su escritura para “Avatar”. Sin embargo, un comentario específico lo ha metido en aprietos, ya que algunos sienten que contribuye a la “retórica antiindígena”.
“Sentí que había retrocedido 130 años en el tiempo viendo lo que los Lakota Sioux podrían haber estado diciendo en un momento en que los empujaban y los mataban y se les pedía que se desplazaran y se les daba algún tipo de compensación”, dijo.
