El recuento de muertos por el accidente aéreo del domingo en Tanzania aumentó a 19, dijo el primer ministro Kassim Majaliwa, luego de que el vuelo de Precision Air con docenas de pasajeros a bordo se hundiera en el lago Victoria mientras se acercaba a la ciudad noroccidental de Bukoba.
“Todos los tanzanos están con ustedes en el luto por las 19 personas que perdieron la vida durante este accidente”, dijo Majaliwa a una multitud después de llegar al aeropuerto de Bukoba, donde el vuelo estaba programado para aterrizar desde la capital financiera Dar es Salaam.
Las autoridades regionales dijeron anteriormente que 26 sobrevivientes de las 43 personas a bordo del vuelo PW 494 habían sido rescatados y trasladados al hospital en la ciudad junto al lago.
Pero Precision Air, una compañía que cotiza en bolsa y es la aerolínea privada más grande de Tanzania, dijo en un comunicado que 24 personas sobrevivieron al accidente, y un funcionario de la aerolínea dijo a la AFP que los otros dos pacientes hospitalizados no estaban a bordo del avión para empezar.
“Hay dos personas que resultaron heridas durante los esfuerzos de rescate que se cuentan como sobrevivientes pero no eran pasajeros”, dijo bajo condición de anonimato.
La aerolínea dijo que envió rescatistas e investigadores al lugar y expresó sus “más profundas condolencias” por el accidente, que ocurrió alrededor de las 08:53 am (05:53 GMT) del domingo.
La compañía dijo que el avión era un ATR 42-500, fabricado por la firma franco-italiana ATR con sede en Toulouse, y tenía 39 pasajeros, incluido un bebé, y cuatro miembros de la tripulación a bordo.
Las imágenes de video difundidas en los medios locales mostraron que el avión estaba sumergido en gran parte mientras los rescatistas, incluidos los pescadores, caminaban por el agua para llevar a las personas a un lugar seguro.
Los trabajadores de emergencia intentaron sacar la aeronave del agua usando cuerdas, asistidos por grúas mientras los residentes también buscaban ayuda.
La presidenta Samia Suluhu Hassan expresó sus condolencias a los afectados por el accidente y dijo: “Rezamos a Dios para que nos ayude”.
El desastre se encuentra entre los accidentes aéreos más mortíferos en la historia de la nación de África Oriental.
La embajada de Estados Unidos en Dar es Salaam emitió un comunicado en el que rindió homenaje a “los esfuerzos heroicos de los socorristas, especialmente de los ciudadanos comunes que ayudaron a rescatar a las víctimas”.
El presidente de la Comisión de la Unión Africana, Moussa Faki Mahamat, también compartió sus condolencias, al igual que el secretario general del bloque regional de la Comunidad de África Oriental, Peter Mathuki.
“Nuestros corazones y oraciones van a las familias de los pasajeros a bordo de un avión que se estrelló en el lago Victoria, con nuestra total solidaridad con el gobierno y el pueblo de #Tanzania”, escribió Faki en Twitter.
“La Comunidad de África Oriental se une y envía nuestras condolencias a Mama Samia Suluhu Hassan, familiares y amigos de todos los afectados por el accidente del avión de Precision Air”, dijo Mathuki, también en Twitter.
Precision Air, que es propiedad parcial de Kenya Airways, fue fundada en 1993 y opera vuelos nacionales y regionales, así como vuelos chárter privados a destinos turísticos populares como el Parque Nacional Serengeti y el archipiélago de Zanzíbar.
El accidente se produce cinco años después de que 11 personas murieran cuando un avión perteneciente a la compañía de safaris Coastal Aviation se estrelló en el norte de Tanzania.
En marzo de 2019, un vuelo de Ethiopian Airlines de Addis Abeba a Nairobi se estrelló seis minutos después del despegue en un campo al sureste de la capital etíope, matando a las 157 personas a bordo.
El desastre, cinco meses después de un accidente similar en Indonesia, provocó la puesta a tierra global del modelo de avión Boeing 737 MAX durante 20 meses, antes de que volviera al servicio a finales de 2020.
En 2007, un vuelo de Kenya Airways desde la ciudad de Abiyán, en Costa de Marfil, a la capital de Kenia, Nairobi, se estrelló contra un pantano después del despegue, matando a los 114 pasajeros.
En 2000, otro vuelo de Kenya Airways de Abiyán a Nairobi se estrelló en el Océano Atlántico minutos después del despegue, matando a 169 personas, mientras que 10 sobrevivieron.
Un año antes, una docena de personas, incluidos 10 turistas estadounidenses, murieron en un accidente aéreo en el norte de Tanzania mientras volaban entre el Parque Nacional Serengeti y el aeropuerto Kilimanjaro.
