Este jueves por la noche hubo tiroteo dentro de un edificio utilizado por los testigos de Jehová en la ciudad de Hamburgo, en el norte de Alemania, donde hay 6 muertos y 30 heridos hasta el momento.
El tiroteo tuvo lugar en el distrito de Gross Borstel, unos kilómetros al norte del centro de la segunda ciudad más grande de Alemania.
“Solo sabemos que aquí murieron varias personas; varias personas están heridas, fueron trasladadas a hospitales”, dijo el portavoz de la policía, Holger Vehren.
Dijo que no tenía información sobre la gravedad de las lesiones sufridas por los heridos. La policía no confirmó los informes de los medios alemanes, que no mencionaron las fuentes, de seis o siete muertos.
La escena del tiroteo fue el Salón del Reino de los Testigos de Jehová, un edificio moderno y cuadrado de tres pisos al lado de un taller de reparación de automóviles.
Vehren dijo que la policía fue alertada del tiroteo alrededor de las 9:15 p. m. y llegó al lugar rápidamente.
Dijo que después de que los oficiales llegaron y encontraron personas con aparentes heridas de bala en la planta baja, escucharon un disparo desde un piso superior y encontraron a una persona herida de muerte arriba que pudo haber sido un tirador.
Dijo que la policía no tenía que usar sus armas de fuego. Vehren dijo que no había indicios de que un tirador estuviera huyendo y que parecía probable que el perpetrador estuviera en el edificio o entre los muertos.
Dos testigos entrevistados por la televisión alemana, cuyos nombres no fueron proporcionados, dijeron que escucharon 12 disparos.
La policía no tenía información sobre el evento que estaba ocurriendo en el edificio cuando se produjo el tiroteo.
Tampoco tenían información inmediata sobre un posible motivo. Vehren dijo que “el trasfondo aún no está completamente claro”.
El alcalde de Hamburgo, Peter Tschentscher, tuiteó que la noticia era “impactante” y ofreció su simpatía a los familiares de las víctimas.
Los testigos de Jehová son parte de una iglesia internacional, fundada en los Estados Unidos en el siglo XIX y con sede en Warwick, Nueva York. Afirma una membresía mundial de alrededor de 8,7 millones, con alrededor de 170.000 en Alemania.
Los miembros son conocidos por sus esfuerzos de evangelización que incluyen tocar puertas y distribuir literatura en las plazas públicas.
Las prácticas distintivas de la denominación incluyen negarse a portar armas, recibir transfusiones de sangre, saludar una bandera nacional o participar en el gobierno secular.
