Filtran nuevas fotos y vídeos de las polémicas fiestas privadas de Sean “Diddy” Combs con celebridades de Hollywood
Las imágenes presentan a diversas mujeres desnudas, reclinadas sobre mesas adornadas con frutas y aperitivos, mientras el reconocido rapero se relaciona con otras personas, incluido el actor Will Smith.
Desde que su expareja, Cassie, lo demandó en noviembre del año anterior, la reputación de Diddy, uno de los más destacados representantes del hip hop en Estados Unidos, ha sufrido un notable deterioro.
La cantante lo ha acusado de delitos sexuales y agresión física, lo que ha dado lugar a una serie de denuncias que retratan a Diddy como un individuo con una "ira descontrolada", que coaccionaba a sus víctimas para mantener relaciones íntimas con trabajadoras sexuales, frecuentemente bajo la influencia de sustancias como la ketamina, el éxtasis y el GHB.
El siempre atento anfitrión, el rapero y magnate musical Sean 'P Diddy' Combs, salió al balcón de su mansión en los Hamptons durante un verano de la década de 2000 para informar a los invitados más sensibles que pronto sería el momento de regresar a casa. La fiesta estaba a punto de tomar un giro más serio.
"Hemos alimentado y dado de beber, ahora es el momento de disfrutar de la vida", proclamó entre vítores.
"Esta es una celebración de la vida. Esta es la auténtica Fiesta Blanca. Los niños tienen una hora más [y luego] esto se transformará en un evento al que, cuando crezcan, todos querrán asistir... así que empecemos a movernos, guardemos a los niños. Todo está bien".
El evento fue una de las célebres Fiestas Blancas de Combs, lujosas celebraciones que organizaba anualmente entre 1998 y 2009, principalmente en su mansión de 420 metros cuadrados en East Hamptons, aunque también en Beverly Hills e incluso en Saint Tropez.
Las personalidades adineradas y famosas asistieron a estas fiestas, así como a sus igualmente deslumbrantes celebraciones de cumpleaños, algunas de las cuales contaron con hasta 1.000 invitados.
Desde Beyoncé y su esposo Jay-Z, hasta Naomi Campbell, Kanye West, Mariah Carey, Sarah Jessica Parker, Martha Stewart, Salman Rushdie, Russell Brand y Leonardo DiCaprio, todos fueron capturados en fotografías, cumpliendo con el estricto código de vestimenta de color blanco.
Will Smith involucró a Jaden Smith
Por otro lado, una invitación en video que Combs envió para su fiesta de cumpleaños número 29 incluía elogios entusiastas de Will Smith, Oprah Winfrey, Ben Stiller e incluso Donald Trump.
Estas festividades, que iniciaban durante el día y se extendían hasta la mañana siguiente, se hicieron tan evidentes que, al ser interrogadas, las estrellas se reían de manera incómoda y se negaban a ofrecer comentarios sobre lo que habían presenciado.
Las imágenes capturadas en una de estas celebraciones muestran a mujeres en topless rodeando a un invitado masculino en la piscina, mientras le vierten champán por la garganta, y a Combs derramándolo sobre otras dos mujeres, que solo llevaban braguitas de bikini y se besaban entre sí.
"Creo que la mitad de las personas presentes estaba desnuda", comentó la estrella de reality shows Khloe Kardashian a sus amigos en 2014. Dos años después, le expresó efusivamente a Combs, también conocido como Puff Daddy, cuando apareció en su programa: "Bueno, sé que eres famoso por las fiestas. Cuando piensas en una fiesta o en divertirte, piensas en Puff".
Sin embargo, esa percepción ha cambiado. Presumir de haber asistido a las reuniones en casa de Diddy se ha vuelto repentinamente muy anticuado. Combs, de 54 años, no parece estar disfrutando de su situación actual, ya que se encuentra en un centro de detención notoriamente sombrío en Brooklyn, enfrentando acusaciones de crimen organizado, tráfico sexual forzado, fraude o coerción y transporte para ejercer la prostitución.
Si es hallado culpable, podría enfrentar una condena a cadena perpetua. Él niega las acusaciones y su abogado ha declarado que Combs "es una persona imperfecta, pero no es un criminal".
La grave denuncia contra Sean “Diddy” Combs
La acusación de 14 páginas, que abarca desde 2008 hasta la actualidad, sostiene que el multimillonario organizó "una empresa criminal" a través de su vasto imperio comercial, involucrándose en actividades como el tráfico sexual, delitos relacionados con drogas, trabajos forzados, incendios intencionados, sobornos, secuestros y un prolongado historial de abuso físico hacia mujeres, entre otros crímenes.
Mientras tanto, la industria del entretenimiento observa con preocupación qué figura será la próxima en verse envuelta en este escándalo.
Aunque la acusación no menciona de manera explícita las Fiestas Blancas, se enfoca en gran medida en otros eventos mucho más oscuros que Combs supuestamente organizó, denominados "conflictos de monstruos".
Estas eran fiestas sexuales privadas que generalmente se llevaban a cabo en suites de hoteles de lujo. En estas orgías participaban prostitutas (tanto heterosexuales como homosexuales), un suministro inagotable de alcohol y drogas, así como grandes cantidades de aceite para bebés y lubricantes.
Los investigadores han afirmado haber encontrado mil botellas de aceite durante las redadas en las propiedades de Combs. Se reporta que algunos de estos "desastres" se extendieron por días, dejando a los participantes exhaustos, quienes necesitaban rehidratarse mediante goteo intravenoso.
La situación era tan extrema que se dice que Combs tuvo que cubrir los costos de reparación no solo de los daños a los hoteles, sino también de las personas involucradas.
Se presume que su exnovia Cassie, cuyo nombre real es Casandra Ventura, intentaba escapar de un incidente similar en 2016, cuando las cámaras de seguridad de un hotel en Los Ángeles captaron a Combs atacándola de manera brutal, incluso lanzando un jarrón en un pasillo.
Los fiscales argumentan que Combs no solo fue el autor intelectual de estos actos, sino que también grabó frecuentemente esos episodios y utilizó los vídeos como medio de coerción para evitar que los implicados presentaran denuncias.
En este contexto, varias de las mujeres que lo acusan han establecido paralelismos entre él y el financista pedófilo Jeffrey Epstein, quien supuestamente grababa de manera clandestina a sus célebres amigos en actos sexuales con las jóvenes que él les ofrecía.
Gene Deal, antiguo guardaespaldas de Combs, declaró esta semana que el magnate de la música poseía grabaciones de políticos involucrados en sus extravagantes reuniones. Deal mencionó que su denuncia podría poner en riesgo la reputación de celebridades y funcionarios de alto rango.
¿Justin Bieber, una víctima más?
A pesar de que algunos sostienen que estos acontecimientos eran completamente independientes de las ostentosas celebraciones de celebridades, se ha argumentado que conductas ilícitas también se manifestaban en estas últimas de manera encubierta, en rincones aislados de la fiesta o tras la partida de la mayoría de los asistentes, mientras Combs y sus allegados se retiraban para participar en actos sexuales explícitos y consumir sustancias ilegales.
Tom Swoope, un ex asistente de la White Party, sostiene que el evento al que asistió era de "bajo perfil" y que en áreas VIP privadas de la residencia, los invitados, tanto hombres como mujeres, eran sometidos a humillaciones sexuales bajo la promesa de contratos discográficos o compensaciones monetarias, mientras que en ocasiones se inhalaban drogas, principalmente cocaína y éxtasis, directamente de los cuerpos de los asistentes.
Por otro lado, un ex narcotraficante relató al The New York Post que, en una ocasión, fue convocado a la casa de Diddy en los Hamptons durante una de sus grandes fiestas, donde la estrella, ataviada únicamente con una bata de baño, lo condujo a un dormitorio, sorprendiendo al testigo al encontrar a raperos involucrados en actos sexuales entre ellos.
Estos relatos han avivado las afirmaciones sobre la bisexualidad de Combs. Rodney "Lil Rod" Jones, un productor musical que colaboró con Combs, ha presentado una demanda por agresión sexual, alegando que Combs lo sometió a constantes "manoseos" (tocando sus genitales) y trató de "prepararlo" para mantener relaciones sexuales con otro hombre, asegurándole que era una práctica común en la industria musical. Combs niega las acusaciones.
Es previsible que algunos se cuestionen si los asistentes a sus anteriores celebraciones pueden ofrecer información relevante sobre los supuestos delitos que se le imputan.
Entre los raperos, cantantes y productores que han formado parte de su círculo cercano a lo largo de los años, se encuentran no solo Jay-Z, sino también la reconocida figura del R&B, Usher. Este último debe gran parte de su trayectoria a Combs, quien, tras la intervención de un ejecutivo de la industria musical, lo acogió en su hogar durante un año en 1994, cuando Usher tenía apenas 14 años.
En una entrevista concedida a la revista Rolling Stone en 2004, Usher, quien ha sido señalado por eliminar tuits que mencionan a Combs desde su detención, afirmó que su mentor le enseñó "un conjunto de experiencias completamente distintas, especialmente en lo que respecta al sexo".
Prosiguió diciendo: "Siempre había mujeres alrededor. Abrías una puerta y te encontrabas con alguien en plena acción, o con varias personas en una habitación participando en una orgía".
Hasta el momento, Usher no ha emitido comentarios sobre las acusaciones dirigidas a Combs.
Por otro lado, el cantante canadiense Justin Bieber también ha mantenido una relación con Combs a lo largo de los años, desde que alcanzó la fama en YouTube a los 15 años y firmó un contrato con la discográfica de Usher.
Recientemente han resurgido en las redes sociales imágenes de un joven Bieber junto a su mentor Combs, quien es 24 años mayor. En una de estas grabaciones, Combs le dice a la cámara: "Está pasando 48 horas con Diddy, no podemos revelar nuestra ubicación ni lo que estamos haciendo, pero definitivamente es el sueño de un chico de 15 años".
Cuando se le pregunta qué desea hacer, Bieber responde a su amigo: "vamos a buscar chicas", a lo que Combs contesta: "Un hombre que me guste. A eso me refiero".
Cuando Khloe Kardashian relató la fiesta de Combs en la que "la mitad de los asistentes estaba desnuda", mencionó que Bieber, quien en ese momento tenía alrededor de 19 o 20 años, era uno de los invitados.
Un video más reciente que ha generado controversia en las redes sociales muestra a Bieber, ya adulto, abrazando a Combs. Sin embargo, algunos observadores han señalado que parece que Combs está revisando a Bieber para verificar si lleva un micrófono oculto que podría grabar su conversación.
A pesar de esto, la relación entre ambos se mantuvo lo suficientemente fuerte como para que Bieber colaborara en el último álbum de Combs, lanzado el año pasado, y en el que Bieber se refirió a él como su "hermano".
A pesar de que la carrera de Bieber ha estado marcada por problemas de salud mental, aún no ha realizado comentarios públicos sobre el arresto de Combs, y fuentes cercanas indican que no tiene intención de hacerlo.
Se afirma que Bieber quedó completamente "desconcertado" ante las noticias sobre los presuntos delitos y se ha señalado que el cantante "mantuvo una larga distancia de Diddy [durante el tiempo] en el que cree que ocurrieron la mayoría de estos incidentes".
La fuente agregó: "Bieber está afectado por la situación relacionada con Diddy y no está preparado para procesar ni discutir el tema, por lo que ha decidido desconectarse". El cantante se está enfocando en su primer hijo, Jack, quien nació el mes pasado con su esposa, la modelo Hailey.
Otro video de Bieber que ha captado la atención desde que se hicieron las acusaciones contra Combs muestra una emotiva entrevista de 2020, en la que habla sobre su deseo de proteger a su colega Billie Eilish de los excesos de la industria musical. "Solo quiero protegerla. No quiero que pase por lo que yo viví. No le deseo eso a nadie", expresa Bieber, mientras se seca las lágrimas. "Fue una experiencia difícil... fue oscura".
Otra figura prominente que era joven cuando se vio envuelta en el círculo social de Combs es el actor Leonardo DiCaprio. En 2018, Vogue entrevistó a Combs y le preguntó quién sería su invitado.
