En sus tres meses de transmisión, Gran Hermano Chile ha enfrentado una de sus crisis más notables. Todo esto se concentra en la expulsión del participante Rubén Gutiérrez, de 26 años. Esto a raíz de las denuncias de Scarlette Gálvez que acusó que fue tocada indebidamente mientras dormía.
Cuando Scarlette Gálvez afirmó que Rubén Gutiérrez había actuado de manera inapropiada mientras ella dormía, se desató el revuelo. Rubén fue aislado del resto de competidores el sábado a raíz de estas acusaciones, y al día siguiente durante el horario estelar se confirmó su expulsión.
Dado que su relación con la producción se disolvió, Rubén no tendrá la oportunidad de aparecer en el programa como los demás concursantes que fueron expulsados de Gran Hermano para hablar de su experiencia.
Rubén Gutiérrez recibirá los pagos acordados por su estancia en la casa de Gran Hermano, pese a la polémica. Además, en la producción se notó que la circunstancia fue manejada con más habilidad que otras polémicas anteriores en el programa, como la que involucra a Lucas Crespo.
Rubén solo se sabe que esta muy afectado
El equipo de producción, por su parte, brindó apoyo psicológico y orientación a Scarlette y le dio opciones, entre ellas abandonar el programa o elegir si se hacía público lo sucedido. Además, mientras enfrenta esta situación, Rubén Gutiérrez cuenta con el apoyo de profesionales de la salud mental.
Gutiérrez se ha resistido hasta el momento a mencionar su despido del reality. Según los informes, el excarabinero ha llorado mucho tras el hecho que lo tiene en el ojo de huracán.
