Escándalo en ENAP: gerente es despedido por “pituto” a su pareja y desata crisis interna
La Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) enfrenta uno de sus mayores escándalos internos de los últimos años, luego de que una investigación disciplinaria confirmara que el exgerente general de ENAP Refinerías, Patricio Farfán Bórquez, incurrió en faltas a la probidad al favorecer la contratación de su pareja —hoy esposa— en un cargo que dependía directamente de él.
Farfán, uno de los ejecutivos con más poder dentro de la estatal y con un sueldo cercano a los $17 millones líquidos, fue desvinculado el 13 de octubre tras un proceso “expedito y reservado”, según la propia compañía.
Cómo se gestó el caso
De acuerdo con denuncias de los sindicatos, la llegada de Alejandra Ternicien Soto, trabajadora social y pareja de Farfán, se produjo luego de una serie de movimientos internos:
Un funcionario con más de 15 años de servicio fue removido sin explicación clara.
El gerente local de la refinería de Concón, Jorge Santander, fue despedido tras negarse a contratarla.
Los sindicatos aseguran que ambos hechos fueron parte del camino que permitió abrir el cupo para Ternicien.
Un primer concurso público fue declarado desierto, pero al poco tiempo ENAP reabrió las postulaciones, ajustó el perfil del cargo y mejoró las condiciones económicas. En esta segunda búsqueda, Ternicien fue seleccionada, pese a que en el primer proceso había sido evaluada como “no recomendable”.
El conflicto dentro de la estatal
Fuentes internas describen que la movida generó una fractura inmediata entre el directorio y la plana ejecutiva:
“Farfán era una figura clave. Esto echó abajo todo el discurso del ‘trabajador integral’”, comentan desde la propia empresa.
El escándalo obligó al directorio a solicitar una indagatoria independiente. Para ello, ENAP contrató al exfiscal Carlos Gajardo, quien en menos de dos semanas concluyó que el gerente había vulnerado principios esenciales de la administración pública.
Consecuencias y silencio de los involucrados
Ternicien también fue desvinculada. Ambos, quienes contrajeron matrimonio el 1 de septiembre, optaron por no entregar declaraciones y preparan acciones legales contra la estatal.
ENAP, por su parte, declaró que su compromiso con la ética y la probidad es “incuestionable” y que el caso refuerza la necesidad de mantener estándares estrictos dentro de la compañía. Sin embargo, la empresa no ha informado los honorarios pagados por la investigación ni detalles del contrato con Gajardo.