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La historia de Lacoste en Chile

La chomba, uno de los productos más característicos de la marca, está pensada para ser un elemento que mantenga cierta elegancia.

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LacostePermanecer durante mucho tiempo como una empresa innovadora en el rubro de la moda no es para cualquiera. Todo el tiempo surgen nuevos competidores y las tendencias exigen estar al día. Por lo tanto, es muy destacable lo hecho por Lacoste, que está cercana a cumplir  los 100 años.

La chomba, uno de los productos más característicos de la marca, está pensada para ser un elemento que mantenga cierta elegancia, pero con más comodidad que la tradicional combinación de camisa y corbata.

Lacoste es una reconocida empresa de fabricación de ropa, relojes, perfumes, zapatos y otras indumentarias, de Francia, surgida en la ciudad de Troyes.

Es una de las más presentes en el mundo de la moda y una de las más reconocibles por su característico logo, un cocodrilo verde con detalles en rojo. Este logo está incorporado a la mayoría de sus productos y la compañía fue una de las precursoras en la idea de poner el logo de la marca en el pecho de sus productos.

¿Cómo surge la marca?

En 1923, en Boston, el joven tenista René Lacoste de apenas 19 años, representaba al combinado francés en la Copa Davis. Alan Muhr, su entrenador, le prometió en caso de que ganara su partido un maletín de piel de cocodrilo que habían visto en una tienda. René perdió, pero esa apuesta y la tenacidad con la que jugó le dieron el apodo de “Le Crocodile” (el cocodrilo).

En esa época, practicar deportes como el tenis de manera profesional, era cosa de las clases altas y se jugaba de camisa y pantalón de pinza blancos. Lacoste ya había desafiado los convencionalismos, jugando algunos partidos con una camisa a la que le había cortado las mangas para tener mayor movilidad, cuando en 1933 se unió a André Gillier y desarrolló la marca que lleva su apellido y sigue de moda hasta el día de hoy.

El polo L. 12.12

En la década del 30, luego de retirarse como tenista, Lacoste se embarcó como empresario. Y su primer objetivo fue conseguir una prenda similar a las usadas en la época, pero que aportara mayor comodidad.

La chomba original, la “Polo shirt” surgió de los campos de polo de la India. Tenía manga larga y cuello abotonado para que no fuera movida por el viento, sobre todo por esa tradición de etiqueta que estaba relacionada al deporte en aquella época.

Teniendo este antecedente, René y Gillier desarrollaron la Polo L.12.12, la primera prenda Lacoste hombre. La L es por el apellido del creador, el 1 es por el tejido de piqué exclusivo de la marca, el 2 por ser manga corta y el 12 porque a Lacoste le mostraron varios prototipos de este primer modelo y la número 12 fue la que terminó eligiendo.

La llegada de Lacoste al país

70 años después de la conformación de la marca, y cuando ya estaba instaurada como un sinónimo de moda a nivel mundial, el grupo inversor Exxel Group decidió junto con la empresa textil Vesubio, crear  las primeras tiendas de venta de la marca del cocodrilo, luego de cerrar un acuerdo con la casa matriz. Para 2019, ya había una decena de tiendas exclusivas en todo Chile.

En la actualidad, Lacoste Chile es sinónimo de calidad y comodidad, sin perder la elegancia que correspondería más a la tradicional combinación de camisa, corbata y saco.

Su fundador tenía como frases de cabecera “sin elegancia, jugar y ganar no es suficiente” y “la elegancia requiere de prendas adecuadas para cada circunstancia”. Por eso, las tiendas chilenas son un fiel ejemplo de lo que la empresa tiene como historia.

El Polo

Más allá de tener una gran variedad de elementos a la venta, su producto más famoso es la polera Lacoste, también conocida como Polo. Este modelo es la base de lo que sigue y conocemos hasta el día de hoy, siendo Lacoste y Gillier no solo creadores del polo en sí, sino también desarrolladores del tejido con el que se hizo, el Petit Piqué.

Este producto se desarrolla en la casa matriz de Lacoste, está fabricado en fibras de algodón más largas de lo normal unidas en dos niveles, algunas más apretadas y otras con más soltura, lo que da como respuesta un material resistente, pero ligero y transpirable.

Lo interesante es que muchas marcas han intentado replicar el producto y han salido elementos similares, pero ninguno que lo iguale. Son las únicas polo que pueden pasar de generación en generación sin que se note el paso del tiempo. En eso también está la exclusividad que caracteriza a la marca Lacoste.

El problema de las copias

Como ya hemos dicho, Lacoste es pionera en la idea de poner el logo de la marca sobre la ropa que vende. Sin embargo esto, sumado a lo característico del logo, ha sido un “peligro” para la empresa.

Que con tan solo escuchar el nombre de la marca aparezca en la mente el cocodrilo, y considerando que no es una imagen tan sencilla de replicar, que esto suceda demuestra su popularidad.

El problema es que esto viene atado a los riesgos de copia del producto. Desde la marca se ha vivido eso siempre como algo con lo que lidiar ya que es inevitable.  Ante una revisión rápida de la prenda se reconocerá una versión original de una que no. La calidad de la marca siempre terminará saltando a la vista.

En Chile, hay muchas tiendas especializadas en la venta de indumentaria y también tienes la posibilidad de buscar en diversas plataformas digitales para conocer los mejores modelos de esta marca tan exclusiva.

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