Kevin Conroy, quien le dio a la animación de Batman una voz icónica durante décadas, murió el jueves después de luchar contra el cáncer, según un comunicado de prensa de Warner Bros. Tenía 66 años.
El agente de talentos Steven Neibert, quien trabajó con Conroy durante “más de 25 años”, también confirmó su muerte el viernes y dijo que “la comunidad de locutores perdió a uno de los grandes”.
Conroy fue la voz detrás de “Batman: The Animated Series”, que se emitió en Fox Network desde 1992 hasta 1996. Otras voces famosas entre el elenco incluyeron al Joker de Mark Hamill y Bob Hastings, quien interpretó al amigo cercano de Batman, James Gordon.
“Kevin fue la perfección”, dijo Hamill en el comunicado del viernes. “Era una de mis personas favoritas en el planeta, y lo amaba como a un hermano. Realmente se preocupaba por las personas que lo rodeaban: su decencia brillaba a través de todo lo que hacía. Cada vez que lo veía o hablaba con él, mi espíritu estaba elevado.“
Su papel en la serie animada de los 90 lo llevó a asumir más roles de voz de Batman a lo largo de la franquicia, incluidas las series de televisión “Batman Beyond” y “Justice League Unlimited”. Incluso prestó su voz al Caballero de la Noche en varios videojuegos derivados de la franquicia.
En las ocho décadas de historia de Batman, nadie interpretó más al Caballero de la Noche.
Nacido en Westbury, Nueva York, y criado en Westport, Connecticut, Conroy comenzó como un actor de teatro bien entrenado. Antes de recibir la llamada para disfrazarse de Batman, Conroy era un actor de teatro que estudiaba en The Julliard School y compartía habitación con Robin Williams.
Después de graduarse, realizó una gira con el grupo de actuación de John Houseman, The Acting Company. Actuó en “Sueño de una noche de verano” en el Teatro Público y en “Eastern Standard” en Broadway. En el Old Globe Theatre de San Diego, actuó en “Hamlet”.
La producción de la década de 1980 de “Eastern Standard”, en la que Conroy interpretó a un productor de televisión que vive en secreto con SIDA, tuvo un significado especial para él. Conroy, que era gay, dijo en ese momento que asistía regularmente a los funerales de amigos que murieron de SIDA. Derramó su angustia todas las noches en el escenario.
En 1980, Conroy se mudó a Los Ángeles, comenzó a actuar en telenovelas y consiguió apariciones en series de televisión como “Cheers”, “Tour of Duty” y “Murphy Brown”. En 1991, cuando la directora de casting Andrea Romano buscaba a su actor principal para “Batman: la serie animada”, pasó por cientos de audiciones antes de que llegara Conroy. Estuvo allí por recomendación de un amigo, y eligió al actor de inmediato.
Conroy comenzó el papel sin antecedentes en los cómics y como un novato en la actuación de voz. Su Batman era fornido, melancólico y oscuro. Su Bruce Wayne era ligero y apuesto. Su inspiración para las voces contrastantes, dijo, provino de la película de 1930, “The Scarlet Pimpernel”, sobre un aristócrata inglés que lleva una doble vida.
La popularidad de Conroy entre los fanáticos lo convirtió en una personalidad codiciada en el circuito de comic-con. En el a menudo tumultuoso mundo de DC Comics, Conroy era un pilar y muy querido.
DC Comics recordó a Conroy en Twitter como “un actor legendario”.
“DC está profundamente entristecido por el fallecimiento de Kevin Conroy”, escribió la cuenta oficial. “La voz de Batman durante varias generaciones. Sus amigos, familiares y fanáticos lo extrañarán por siempre”.
Michael Rosenbaum, quien prestó su voz para Flash en la serie “Justice League”, calificó la muerte de Conroy de “devastadora” y compartió varias fotos de ellos juntos.
“Kevin fue un hombre notable por dentro y por fuera. Realmente extrañaré esos grandes abrazos y esa voz mágica. Siempre serás mi batman. Descansa en paz, amigo mío”, escribió Rosenbaum.
