Tras un análisis de los datos realizado por el Banco Central, se determinó que en 2023 el flujo de inversión experimentó un incremento del 19,2%, en contraste, la cifra correspondiente a 2022 fue ajustada a la baja.
Según los informes, la medida responde a la presión de un fondo de cobertura activista, las circunstancias desfavorables del mercado y la necesidad de reducir los gastos.